orificio

Benedetto, el vecino de arriba, es un modernista. La otra noche, mientras intentaba conciliar el sueño, el estrepitoso sonido de su teatro en casa no me facilitaba la tarea. Subí hacia su apartamento con la pijama puesta. Toqué la puerta como la gente, pero abrió hasta que incrementé considerablemente la violencia de mis golpes. De inmediato, conocí su televisor plasma de cuarenta y dos pulgadas, y al verlo, mis sospechas resultaron ciertas: Benedetto estaba viendo una película porno. En la pantalla, dos mujeres se besaban como locas, incluso en esas partes que el pudor no me permite nombrar. Las dos luchando una sobre la otra, y luego, saboréandose entre sí. Era como ver cazar a un oso hormiguero. Benedetto escuchó atento mis súplicas y justo cuando terminé mi arenga, liberó todo el desprecio de su hedonismo, diciendo: si la televisión tuviera un orificio de mediano tamaño, por el cual yo pudiera fornicar con ella, sería la novia perfecta.

Bajé a mi apartamento. Me volví a acostar y disfruté del absoluto silencio. Pero no me pude dormir.

Comentarios

Anónimo ha dicho que…
vamos..porque habria de robarte del sueño..es tan malo desear algo asi?

Besos ^^
Prado ha dicho que…
porque me lo imaginé haciéndolo. saludos.
PROSÓDICA ha dicho que…
descargarse asi es amarse a si mismo por sobre todo. El pensar como el vecino convierte a una relacion en un objeto de satisfaccion, en donde lo que buscas es saciarte pero no has pensado en darte.

simples refleciones julio.

abrazos
Prado ha dicho que…
genial. la relación objeto sujeto. estereotipo de parejas. que inundan cines, teatros, plazas. no yo. no a mí. quita el sueño pensar en tanta soledad.
Unknown ha dicho que…
no dormiste pensando en lo q viste???
Prado ha dicho que…
en lo que dijo Benedetto. está solo. pienso.

Entradas populares